Por: Juan Manuel Ciucci
Entrevista a Cecilia Fernandez Bugna, Directora del Banco de la Nación Argentina, quien nos brinda un panorama de la entidad bancaria, los desafíos que enfrentaron en el contexto de pandemia y la nueva orientación que le ha brindado la actual gestión. “La banca pública juega un rol central en el desarrollo nacional, contribuyendo al desarrollo productivo y territorial y la inclusión social”.
Revista Broquel: La pandemia que atravesamos ha puesto en crisis muchas de las normas y costumbres que veníamos transitando, ¿qué cambios y desafíos experimentó el Banco Nación en este contexto?
Cecilia Fernandez Bugna*: El Banco Nación enfrentó la pandemia con múltiples desafíos. En primer lugar, volver a dar créditos y recomponer las líneas de financiamiento. Cuando llegamos en diciembre de 2019, encontramos un banco que se había retirado del mercado y había perdido participación. Con lo cual, tuvimos que poner al banco de pie y hacerlo en pandemia supuso más desafíos pero terminamos 2020 liderando la colocación de préstamos al sector privado con $215.232 millones y sumando $139.725 millones en lo que va de 2021.
En segundo lugar, el banco tuvo que adaptar su atención y operatoria a los cuidados y restricciones que exigía la pandemia, tanto para las personas como para las empresas. En tiempo récord se posibilitó la gestión de créditos vía web y, luego, vino BNA+, nuestra billetera digital que no sólo permite la apertura remota de cuentas sino que facilita los pagos y las transacciones. En un año y medio, más de 850.000 personas se vincularon como clientes al Banco y abrieron una cuenta a través de un teléfono móvil.
Estos desarrollos fueron centrales para poder canalizar las políticas sociales y productivas del Estado Nacional, pagamos el IFE, canalizamos créditos a tasa cero, créditos con subsidios para turismo, cultura y sectores con necesidades. En este sentido, avanzamos a pensar el banco y sus empresas como un ecosistema que desarrolle productos y soluciones integrales, trabajando en un profundo cambio tecnológico. Lanzamos un Marketplace, denominado TIENDA BNA, un canal de comercialización y ofertas para los clientes del Banco y una herramienta de inclusión para aquellas PyMEs que quieren ingresar o potenciar su participación en el e-commerce y hoy las ventas superan los $1.000 millones mensuales.
RB: ¿Cuáles son o pueden ser los aportes de la banca pública para el desarrollo nacional?
CFB: La banca pública juega un rol central en el desarrollo nacional, contribuyendo al desarrollo productivo y territorial y la inclusión social. Esto supone orientar los créditos a la inversión y la producción, trabajar para diversificar su cartera de préstamos y trabajar para dar servicios a toda la población. Argentina presenta un sistema financiero relativamente poco desarrollado, con préstamos volcados al consumo, financiación con tarjetas e inversiones títulos, baja participación de los créditos al sector productivo, la falta de asistencia a pymes y un financiamiento de muy corto plazo. El sistema bancario en su conjunto no siempre acompaña a la actividad económica cuando crece o lo necesita.
En este marco, la banca pública, y el Banco de la Nación Argentina principal banco público de país, cumple entonces un rol clave de fomento y de testigo, regulando precios y tasas en niveles más cercanos a los que resultarían de un contexto más competitivo así como también un rol contracíclico, contrarrestando la contracción del crédito en las fases recesivas del ciclo. A su vez, como agente financiero del Estado, un banco como el Nación, con más de 700 centros de atención y cobertura en todo el territorio nacional, constituye un instrumento clave para impulsar políticas públicas sociales y productivas como vimos en la pandemia.
RB: ¿Cómo se pueden pensar y trabajar tanto la soberanía como la defensa de los intereses nacionales desde el Banco Nación?
CFB: En línea con lo que planteé en la respuesta anterior, poniéndose en función de la producción y el trabajo nacional, apoyando a las empresas nacionales, especialmente a las pymes, apostando a la inversión, proveyendo capital de trabajo cuando hace falta. Trabajando para un desarrollo territorial integral, buscando promover y fortalecer la producción en todas las provincias de nuestro país y no sólo en los polos de más desarrollo.
Junto con un Estado que ponga foco en el desarrollo productivo, y no a estrategias de crecimiento basadas en lo financiero, asociadas a ciclos de endeudamiento externo donde la especulación se antepone a la producción. Cuando un gobierno genera un esquema que va contra la producción y el trabajo y provoca cierres masivos de empresas claramente disminuye nuestra soberanía y los intereses nacionales. Contar con industrias diversas en nuestro país nos da grados de autonomía imprescindibles. La producción en el país de la vacuna Spuntink V es un claro ejemplo de ello. Apoyar, acompañar, sostener e impulsar a las empresas de nuestro país es una tarea esencial del Banco Nación.
RB: ¿Cómo analiza que repercuten los cambios en la gestión política del país, en la orientación que lleva adelante el Banco Nación?
CFB: El cambio en la gestión política del país se vio claramente en el Banco Nación. Durante el gobierno de cambiemos, el Banco de la Nación cambió su cartera de créditos, donde perdió participación el financiamiento a las pymes, sufrió una concentración de crédito en grandes empresas y perdió participación en el mercado, asociado a que el Tesoro tomaba fondos. Esta situación llegó al punto que en 2019 el banco se había retirado por períodos del mercado de descuento de cheques para empresas, por ejemplo.
Desde que nos hicimos cargo del banco en diciembre de 2019, trabajamos fuertemente para devolverle las líneas de crédito, de capital de trabajo inicialmente y luego sumamos la de producción; pusimos en marcha fuertes inversiones para generar un salto tecnológico; avanzamos en los pagos, ocupando mercados de los cuales la banca pública no estaba participando. Los números y los resultados luego de un año y medio de gestión son contundentes en este sentido.
RB: Han creado una Gerencia de Género, Diversidad y Derechos Humanos en la entidad. ¿Qué desafíos se le presentan y cuáles son los objetivos que persigue?
CFB: La creación de la Gerencia de Género, Diversidad y Derechos Humanos en septiembre de 2020 es el reflejo de una decisión política muy firme que apunta construir horizontes de igualdad, revertir situaciones de profunda desigualdad, al interior de nuestro banco y en nuestra sociedad, que afectan de manera desproporcionada a las mujeres y personas LGBTQI+. La gerencia apunta a terminar con toda forma de discriminación y garantizar igual de oportunidades, trato y resultados para todas las personas que trabajan en el banco y se relación con él.
Se trata, al final del día, de generar un cambio cultural y dar paso a la construcción de una sociedad más equitativa y justa pero adoptando un compromiso claro y visible con la igualdad y materializarlo en acciones concretas. Por un lado, al interior del banco, el cupo laboral la trans, una política que promueva la participación de mujeres y personas LGBTQI+ en puestos de conducción hoy dominados por varones, lactarios, la revisión de las licencias para compartir las tareas de cuidado, son algunos de los ejemplos en los estamos trabajando. Por el otro, en líneas de crédito para fomentar una participación más equilibrada en la producción y el trabajo, como los préstamos para empresas conducidas por mujeres, o acciones orientadas a la inclusión financiera de quienes son discriminados.
Pero para que todo esto sea posible, trabajamos para erradicar la violencia. El Banco Nación fue pionero en sancionar un protocolo contra la violencia de género. En 2020, aprobamos una nueva versión que incluyó además la violencia laboral y la violencia sobre la base del género. Creamos una estructura específica para atender las denuncias en todo el país y venimos trabajando muy fuertemente en esta materia. En este sentido, nos adelantamos a la ratificación por parte de nuestro del Convenio 190 de la OIT. Este es un tema absolutamente central. Es muy impresionante cuando hablo con mujeres trabajadoras del banco, que su primer reclamo, sea trabajar en un ambiente libre de violencias, la cual es también psicológica, son frases, son chistes, son comentarios para los cuales ya no tiene que haber lugar.
RB: ¿Qué desafíos se le han presentado como la única mujer hasta hace unos días dentro del Directorio del Banco?
CFB: Representar la voz de todas las mujeres en el directorio de la entidad, de personas LGBTQI+, de todos, todas, todes aquellos para los cuales hay que grantizar igualdad de derechos. El sistema financiero es tal vez uno de los ámbitos más masculinizados de nuestra sociedad. Se necesita mucha determinación, compromiso y tarea diaria para transformar estas estructuras. La lucha por la conquista de nuevos derechos, en las calles, nos marca el camino, tenemos que dar respuestas a esas demandas, es urgente, es ya. Por suerte, me encontré con un presidente del banco, Eduardo Hecker, convencido de estas necesidades y un directorio que acompañó y al que, recientemente, se ha sumado otra mujer, Julia Strada.
* Licenciada en Economía de la Universidad de Buenos Aires y Magíster en Economía y Desarrollo Industrial con especialización en PYMES de la Universidad Nacional de General Sarmiento con estudios de Posgrado en la Comisión Económica para América Latina (CEPAL).
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