Por: Redacción Broquel
Entrevista a María Rosenfeldt, Directora de la muestra de arte, ciencia y tecnología más grande de Latinoamérica. “Nuestra tarea es trabajar en la innovación y ser vanguardia en lo que hacemos, brindar una expresión del Estado de calidad”.
Revista Broquel: En principio, ¿cómo salió la edición verano de Tecnópolis y cuál fue la respuesta del público a sus propuestas?
María Rosenfeldt: Esta fue la primera edición de verano más normalizada después de la pandemia. Apenas asumimos fue abrir Tecnópolis para el reencuentro, después vino la pandemia, y luego hicimos los encuentros cuidados. El año pasado fue la edición verano junto con la megamuestra, porque en 2021 se pudo abrir recién el 2 de octubre, por lo que se extendió hasta el verano 2022. Tecnópolis creo que logró ser el espacio donde encontrarnos y donde poder acceder a esta versión verano con shows, talleres, propuestas deportivas. Consolidarse como un espacio masivo, popular, y también disfrutando del parque desde los espacios verdes, desde la naturaleza. Tuvimos el Festival Futurock con cincuenta mil personas y el fin de semana de Carnaval más de 150 mil. Eso nos da la pauta de que la propuesta de Tecnópolis se sigue consolidando, sigue creciendo y genera algo en los visitantes.
Ayer una compañera me decía que vino al Festival Futurock y que es increíble el clima que se vive. Hay algo afectivo que sucede en Tecnópolis, de sentir que es un espacio que nos conecta con algo afectivo. Los propios trabajadores y trabajadoras de Tecnópolis también sienten que es un lugar que genera una identidad y un compromiso. Como un espacio público que se piensa integrado desde el Estado, con una política pública muy presente. Durante la pandemia también hicimos que Tecnópolis esté presente dando respuestas, creo que eso hizo que ahora logremos en este cuarto año de gestión poder arribar a la mejor versión de Tecnópolis. Por el trayecto que fuimos transitando, a pesar de la pandemia, pero siempre estar atentos a que sea un espacio donde brindar respuestas y donde poder acceder al disfrute, pero siempre aportando un contenido, una manera de expresarnos y de ser como argentinas y argentinos.
RB: ¿Cómo dialoga la propuesta de Tecnópolis con las diversas acciones que lleva adelante el Estado Nacional?
MR: En la megamuestra articulamos, sin dudas, porque siempre la idea es poder, a través del arte, la ciencia y la tecnología, expresar el proyecto y las políticas públicas que tenemos como país para proyectarnos hacia el futuro. Todo lo que es el desarrollo científico tecnológico, productivo, cuáles son las carreras prioritarias para despertar vocaciones, quiénes son los referentes a los que debemos nuestro pasado y este presente, los divulgadores y las figuras que queremos resaltar para contarnos eso que somos. Que nuestro potencial y nuestras capacidades se expresen en este espacio. Por eso la articulación es permanente.
Obviamente hay algunos espacios que son casi permanentes en Tecnópolis: nuestro socio el Ministerio de Ciencia y Tecnología, está también la presencia de Aerolíneas Argentinas, de YPF. Después articulamos con el Ministerio de Educación, porque los sábados y domingos tenemos presencia de visitantes de las familias, pero los días de semana es prioridad para nosotros tener las visitas de las escuelas. Después con el Ministerio de Deporte y Turismo desarrollamos todo un área de deporte y arte urbano y trabajamos mucho con las federaciones en todo lo que es el área deportiva que hoy incluye una pista de patín, tenemos básquet 3×3, escala palestra, está el skatepark, propuestas de fútbol tenis, ping pong. Estamos trabajando con la Federación de Vóley para también tener cancha de vóley, Fuimos trabajando mucho en darle cada vez más cuerpo a esto, es un lugar donde venir y apropiarse de este espacio para les jóvenes. Y después todo lo que son las áreas de servicios también son fundamentales para nosotros, el trabajo con ANSES, con PAMI, con la Defensoría del Público. Tenemos también tanto el vacunatorio amigable, que brinda las vacunas del calendario oficial, como lo que fue el vacunatorio de Covid. Es fundamental porque acá justamente la idea es visibilizar todas esas políticas públicas que se están llevando adelante y que sea el espacio donde reconocer al Estado presente. De una manera lúdica y entretenida poder reconocernos, y poder reconocer ese trabajo que es permanente.
También la perspectiva de género, la perspectiva ambiental, los derechos humanos, son fundamentales en toda la gestión. Articulamos mucho con el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad. Tuvimos el cierre de verano con el “Nosotras movemos el mundo”. Al principio de la gestión, cuando se creó el Ministerio de las Mujeres, el Ministerio de Cultura abrazó esa causa y acompañó ese primer 8M con el “Nosotras movemos el mundo”, que hoy estamos arribando a la cuarta edición. Es un gran trabajo de articulación. También Correo Argentino tuvo su espacio acá, Jefatura de Gabinete también. Todo lo que tiene que ver con la innovación y la tecnología es fundamental para nosotros, el poder cruzar el arte y la cultura pero con ese contenido para construir ese espacio hacia adelante. Es permanente el trabajo de articulación para que Tecnópolis sea el lugar donde visibilizar todo lo que estamos haciendo como Estado Nacional.
RB: En ese sentido, ¿cómo analiza su experiencia como Directora estos años en Tecnópolis?
MR: Yo empecé como Directora de Contenidos, venía de trabajar en el Estado desde el año 2006. Trabajé desde los inicios, antes del lanzamiento, en Canal Encuentro, Pakapaka, DeporTV. Después fui Directora de Contenidos del sitio de memoria de la ESMA, y cuando asumió el Ministro Tristán Bauer me convocó para ser Directora de Contenidos en Tecnópolis. Después finalmente quedé como directora. La verdad que Tecnópolis es un gran desafío, porque su escala y magnitud es enorme. Por la diversidad y la simultaneidad de actividades que se conjugan en este espacio. También porque creo fundamental tener esa mirada de innovación del Estado. Creo que las tareas que hacemos nosotros, de comunicación y culturales, disputan mucho con el mercado. Entonces es nuestra tarea trabajar en la innovación y ser vanguardia en lo que hacemos. Brindar una expresión del Estado de calidad. Eso en este espacio es un gran desafío, es plasmar en el espacio, en el territorio de lo que es Tecnópolis, propuestas de calidad, participativas y convocantes para el público que tenemos, que son las infancias, las juventudes y las familias.
Fue un gran desafío pero también Tecnópolis tiene, por un lado, trabajadores y trabajadoras comprometidas con este espacio. Eso lo hace más posible. Porque lo vieron nacer, porque Tecnópolis casi que nació de un imposible y también se creó en un momento bastante épico, que fue después de la Fiesta del Bicentenario allá en 2010. Ante la imposibilidad de hacerlo en la Av. Figueroa Alcorta, ante la negativa del Gobierno de la Ciudad de Mauricio Macri en aquel momento, impidiendo hacer una feria de proyección hacia el futuro de Ciencia y Tecnología temporal. Y finalmente se creó Tecnópolis por decisión de la ex Presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Y se creó en un tiempo récord y con el esfuerzo de muchas personas. Muchos de ellos son los trabajadores de hoy en Tecnópolis. Y ese compromiso de estar en un proyecto con esta posibilidad que tiene Tecnópolis es casi como un privilegio, porque uno puede pensar una idea, llevarla adelante, plasmarla en el espacio y ver en la audiencia cómo funciona. Es como todo el camino desde crear una política y ver el resultado. Abrir las puertas y ver que la comunidad responde, se encuentra en este espacio, viene y accede a lo que uno proyecta, es casi como un privilegio para quienes creemos en lo que las políticas públicas pueden hacer, y que los derechos son los que cambian la vida de los ciudadanos y las ciudadanas. Eso acá lo vemos y es maravilloso y único. También por la escala de Tecnópolis pero también como proyecto cultural, casi que es único en el mundo por ser gratuito, por facilitar este acceso al conocimiento y a lo lúdico, algo de entretenimiento, con este objetivo tan hermoso de abrir imaginarios, despertar vocaciones, el de habilitar eso de poder brindarles a las juventudes y a las infancias posibilidades que de otra manera quizás no tendrían. Y también por hacerlo masivamente junto a otros y a otras. Uno vive esa experiencia de comunidad, de sentir que uno está accediendo a algo y tiene algo en común con el que está disfrutando al lado. Eso es algo también maravilloso que tiene Tecnópolis. En todo sentido fue un gran desafío. Es una gran responsabilidad el espacio, quizás no es el contexto ideal del Estado, porque hoy estamos entre la pandemia, el endeudamiento y el apagón que sufrió durante el macrismo, lo que hace que todo sea bastante complejo. Pero tenemos un gran compromiso con lo que hacemos. Esto es posible porque hay mucha gente trabajando muy comprometidamente hacia un mismo objetivo. Tecnópolis lo logra, y se vive algo maravilloso.
RB: ¿Cómo puede consolidarse la propuesta de este Parque más allá de las diferentes gestiones gubernamentales?
MR: Es un gran desafío que tenemos como Estado. Creo mucho en institucionalizar, darle sistemas de trabajo a los espacios en los que estamos trabajando. Tecnópolis hoy depende del Ministerio de Cultura y de la Subsecretaría de Espacios y Proyectos Especiales, a cargo del ministro Tristán Bauer y de Martín Bonavetti, que también nos brindan la posibilidad porque priorizan Tecnópolis. Nos permiten trabajar en ese sentido. El desafío es permanente porque es un problema que tiene el Estado eso de que puede venir alguien y destruir lo que ya se hizo. Esa sensación de que siempre estamos arrancando de cero. Creo que por lo menos los canales que mencionaba antes como Tecnópolis, sobrevivieron porque fueron espacios que estuvieron bien generados desde sus inicios, porque lograron esa sensación de que los propios trabajadores, la comunidad y los ciudadanos y las ciudadanas los valoren. Es una gran tarea eso de la apreciación de nuestras políticas públicas y de poder defenderlas también. Es un gran desafío que tiene el Estado. Creo que a veces hay cuestiones que atentan contra eso: la inestabilidad presupuestaria, la inestabilidad de los propios trabajadores… Porque vino otra gestión, y por ejemplo cuando llegamos a Tecnópolis, las áreas de comunicación, de contenido, el estudio de grabación de acá, estaban sin personal a cargo. Hubo despidos importantes. Yo creo que lo que tendríamos que lograr es que cada gestión dé cuenta de lo que se hace. En qué punto inició la gestión y cómo se fue trabajando año a año, y cuáles son los resultados de eso. No hay un seguimiento del Estado muy riguroso, como para que cada funcionario rinda cuentas, y no sólo funcionarios, sino que la institución rinda cuentas de cuáles son los resultados. Creo que es un desafío que tenemos como Estado. Yo abono a generar áreas de archivo, áreas de contenido, resultados. Pero bueno, es una tarea magnífica que a veces requiere de mucha capacitación y acompañamiento del Estado, no de una institución que lo aplique.
Creo que sin Estado no hay derechos, no hay mejor futuro para la Argentina, entonces tenemos que ser muy perseverantes y muy defensores de este Estado para poder ser una sociedad más igualitaria, más justa. Ser cada vez más inclusivos, cada vez más accesibles, cada vez más federales. Bueno, todos los desafíos en los que quienes creemos en eso estamos trabajando pero que no alcanza con una gestión, sino con una continuidad a lo largo del tiempo para que eso realmente sea una política de Estado. Yo creo que la cultura, la comunicación, la educación… la educación es algo que está más permeado en la ciudadanía, pero tenemos que trabajar para que la cultura también se conciba como un derecho. Que no es algo de lo que podemos prescindir el acceso a la cultura, al conocimiento, a la transformación. Los cambios culturales son los que permiten también las transformaciones, el avance, el desarrollo de la sociedad. En ese sentido, creo que necesitamos un trabajo mucho más articulado, mucho más hermanado para que no suceda esto que decimos que siempre estamos empezando de cero, y parece que las instituciones no tienen ni memoria, ni historia ni continuidad. Me encantaría que eso suceda en mi país.
RB: Si tuviera que elegir, ¿cuáles creé que son los tres principales atractivos que tiene Tecnópolis?
MR: El área deportiva, el skatepark, la palestra, ahora la cancha de patín, me parecen fundamentales en la propuesta de Tecnópolis, y que eso se siga desarrollando y siga creciendo. Después todo lo que tiene que ver con el despertar vocaciones vinculadas a la ciencia y la tecnología. Me parece que Tecnópolis tiene que seguir trabajando en desarrollar esos contenidos y propuestas, como fue el año pasado el espacio de astronomía y el de soberanía espacial. Eso es como una herramienta de despertar casi como fascinación, como las vocaciones para todo lo que se requiere: programación, la economía del conocimiento, esas vocaciones que son necesarias para poder proyectarnos hacia futuro. Después, también ahora para la megamuestra tenemos una propuesta que se llama Pisar Malvinas, que a través de realidad virtual podemos conocer el territorio de las Islas Malvinas. Acá internamente decimos, esa propuesta tiene que quedar para siempre hasta que las Malvinas sean argentinas. Las argentinas y los argentinos tenemos un vínculo afectivo y de mucha identidad con las Islas, sentimos que tenemos una patria que no está completa. Y es un poco un lugar que me gustaría que todos conozcan y todos pasen por esa propuesta y esa experiencia. Tengo muchos lugares preferidos, los espacios al aire libre, el humedal. Me parece que hay una mirada sobre Tecnópolis que pudimos trabajar también en esta gestión que es en los espacios verdes, en disfrutar también del parque de noche, las luces. Creo que Tecnópolis en sí es una experiencia que todos y todas tenemos que haber transitado al menos una vez en la vida. Y volver, porque nunca alcanza con venir una vez.
RB: ¿Qué nos puede anticipar de lo que queda para el año en Tecnópolis?
MR: Se viene la megamuestra de Julio, como todos los años. Estamos trabajando para abrir las puertas en vacaciones de invierno y poder tener a todos los ministerios, organismos, empresas e instituciones del Estado representadas en este espacio. Con un lema que será ‘La potencia de lo colectivo’. Cada año Tecnópolis tiene un lema y es como un gran paraguas conceptual bajo el cual invitamos a todos los participantes a pensar el espacio y la propuesta. ¿Por qué ese lema? Porque este año cumple 40 años la democracia, es una gran oportunidad para pensar y reflexionar, también para poder transferir a las nuevas generaciones, quienes vivimos el horror de la dictadura y sabemos no sólo por el horror por la desaparición de 30000 personas, por el robo de bebés y todo lo que significó ese período a nivel violencia efectiva en la propia población, sino también económicamente. Porque bueno, instauró el neoliberalismo y lo que significó el endeudamiento para la Argentina, y el proceso también de no avance de países como el nuestro que están ubicados en un lugar del mapa que también no fue casualidad que esas dictaduras estuvieran en todo el cono sur. A partir de eso poder defender, conocernos, aprender, reflexionar, proponer, proyectarnos hacia el futuro. Ver nuestras capacidades y nuestras potencialidades. También, a quienes nacieron en democracia, poder contarles el orgullo que tenemos como sociedad de haber tramitado esa dictadura a través de la memoria, la verdad y la justicia. A través de los organismos de derechos humanos, el trabajo de las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo, que son un ejemplo y una referencia en el mundo a nivel derechos humanos. No hay otro país que haya juzgado a los responsables y asesinos en tribunales comunes. Eso, poder contarlo, pero también el desafío que implica mejorar la democracia en la que vivimos. Poder, entre quienes estemos contando esos años de democracia en este espacio, proyectarnos hacia el futuro y también imaginarnos cuáles son los pendientes de esa democracia y los desafíos hacia los que tenemos que ir para lograr vivir en una sociedad sin violencia. En una sociedad más justa y más igualitaria para todos y todas.
COMENTARIO AQUÍ